pedrobernalmartinez@hotmail.com

jueves, 1 de octubre de 2015

INGLATERRA: REVOLUCIONES Y PARLAMENTARISMO

En el siglo XVIII sólo Gran Bretaña y Holanda contaban con monarquías con poderes del monarca limitados por un Parlamento.
En Inglaterra dos revoluciones durante el siglo XVII acabaron con la monarquía absoluta de los Estuardo.
En 1649, una primera revolución ejecutó a Carlos I, que pretendía gobernar sin control Parlamentario. 
Tras un breve período republicano, el nuevo monarca, Carlos II, tuvo que aceptar el reconocimiento del Hábeas Corpus en 1679, que garantizaba a todo detenido a comparecer ante un juez y contar con un abogado para su defensa.
En 1689, una segunda revolución destronó a los Estuardo, y el Parlamento obligó al nuevo rey, Guillermo de Orange, a jurar la Declaración de Derechos, The Bill of Rights, que limitaba los poderes del monarca y sometía algunas de sus decisiones al Parlamento.
Inglaterra se convirtió en una monarquía parlamentaria. 
Los poderes ejecutivo y legislativo estaban separados y un Parlamento electo votaba las leyes y controlaba a los miembros del gobierno. 
Los ciudadanos tenían garantizada la defensa de su libertad individual y se institucionalizaba una justicia independiente del poder ejecutivo.
Pero era un parlamentarismo con limitaciones ya que sólo una minoría (grandes propietarios agrarios y burgueses), tenía derecho a voto. Además, los habitantes de las colonias no estaban representados en el Parlamento y la esclavitud continuaba siendo aceptada.
El ejemplo inglés se convirtió en un modelo para los pensadores de la Ilustración.
Aquí os dejo un esquema sobre el Parlamentarismo inglés:


No hay comentarios:

Publicar un comentario